Negura Bunget no se rinden. Aclamada banda de la escena extrema rumana, su insinuante propuesta no podía caer en el olvido de buenas a primeras. Hoy en día, los Negura son una banda prácticamente nueva, tras el descalabro que en 2010 la llevó casi a la desaparición, trágico capítulo del cual acabarían formándose dos bandas de similares características.

Crítica de Ángel Silva de Metal4All.net

El percusionista Negru, uno de los miembros fundadores allá por 1995, cuando la formación todavía era un duo, decidió seguir comandando la nave. Mientras, Hupogrammos (el otro miembro fundador) y el guitarrista Sol Faur formaron Dordeduh, banda que sigue la senda marcada por la banda madre y según algunos especialistas del género, hoy en día más interesantes, no obstante Hupogrammos siempre ha sido la cara más visible de Negura Bunget. Este trío dejó para la posteridad algunos de los mejores discos que se han facturado dentro de lo que podría llamarse Black Metal experimental y atmosférico, como el caso de “Om”.

Casi cinco años han tardado los nuevos Negura Bunget en ofrecernos un nuevo disco con el que estimular nuestras lecturas de horror. Ahora como quinteto, la banda nos presenta en “Tau” su estilo de siempre, con una gran carga emocional y atmosférica, dónde cobran protagonismo un buen número de instrumentos tradicionales de su país de nombres practicamente impronunciables.

Aunque la esencia folclórica de Negura Bunget sigue intacta, se nota bastante que a diferencia de sus últimos lanzamientos quizás más vanguardistas, en este “Tau” han buscado una producción mucho más cruda, respetando los cánones del Black Metal más underground. De esta forma se inicia el disco con “Nametenie” que en sus tres cuartas partes es puro Black Metal a la vieja usanza, con unas voces profundas y guturales, y los teclados marcando un halo más sinfónico, tendencia que se mantendrá a lo largo del disco y que se exagerará incluso en cortes como “Tarim Vilhovnicesc”. Aunque todos los temas tienen sus partes folk y algunos ritmos cíngaros, acaso exprimen este aspecto en cortes como “Curgerea Muntelui” o «Picur Viu Foc», dónde es imposible no viajar hasta los oscuros bosques de los Cárpatos. Sin duda, esta faceta de la banda es dónde siguen siendo unos maestros y base esencial para mantener a sus seguidores más acérrimos. Queremos viajar, oler la naturaleza, escuchar el canto ambiental de los pájaros y el repicar de sus picos en los ancestrales árboles del bosque, notar en los huesos la humedad de sus entrañas…y lo consiguen con creces, qué decir!

Sin duda, tanto si ya los conocías como no, este es un disco de escucha recomendada, ahora que se ha puesto de moda todo lo que tiene que ver con el Post Black Metal o la parte más ambiental y experimental del mismo. No es ni de lejos el mejor lanzamiento de la banda y puede que parte de la magia se haya ido con dos de los integrantes más emblemáticos, pero lo que queda claro es que las bandas que están hechas de otra resina son como esos gigantes árboles ancestrales; pura sabiduría. Acaso la savia nueva no sea del todo una mala idea.

Tracklist:

1.Nămetenie
2.Izbucul galbenei
3.La hotaru cu cinci culmi
4.Curgerea muntelui
5.Tărîm vîlhovnicesc
6.Împodobeala timpului
7.Picur viu foc
8.Schimnicește

Crítica de Ángel Silva de Metal4All.net