Han pasado 25 años desde que se publicó Senderos de Traición, segundo álbum de Héroes del Silencio y, probablemente, el mejor disco de rock en castellano de la historia.

Qué decir de tan legendaria grabación que no se haya dicho ya: un disco majestuoso, rotundo, elegante y exquisito. Perfecta producción a cargo de Phil Manzanera grabada básicamente a partir de tomas en directo, con muy pocos overdubs y que define plenamente el sonido genuino Héroes.

Crítica de Miguel Fernández de MariskalRock.com

 

Encontramos las señas de identidad que acompañaron a la banda en su trayectoria: la personal voz de Bunbury con sus alambicadas letras y las guitarras de Valdivia, a veces cristalinas y delicadas, a merced del uso del chorus y el delay; a veces fieras y potentes, plenas de distorsión.

Enrique no volvería a cantar como en este disco y Juan no volvería a tener la magia e inspiración que destilan sus arpegios en el LP. La base rítmica de Cardiel y Andreu cimentó ese sonido y lo cohesionó perfectamente. Fue el momento de oro de Héroes del Silencio.

La reedición que nos ocupa tiene luces y sombras. Su principal atractivo, sin duda, es la inclusión en DVD del glorioso concierto del Hipódromo de La Zarzuela de junio del 91. Inexplicablemente inédito hasta la fecha, muestra al grupo en su mejor momento. Para muestra, un Bunbury de 23 años reptando dramáticamente por el escenario mientras canta las canciones con total fidelidad al disco, sin deformarlas como sucedería en giras posteriores. Otro ejemplo significativo, un Valdivia que aún no llevaba guitarrista de apoyo y no había barroquizado su sonido como pasaría en los directos de discos venideros.

Sin embargo, y a pesar de que el sonido es bueno y tiene graves potentes, no se han esmerado al igual con la imagen, que entiendo se podía haber restaurado con más profundidad. Hay evidencias: en planos generales se echa de menos una mejora de realce de contornos; en el conjunto, se podrían haber quitado los banners informativos de la emisión original televisiva.

Otra de las bazas de esta edición es la inclusión de fotografías inéditas, que lo son hasta cierto punto, puesto que muchas de ellas se habían ya publicado en el libro oficial de fotografías de 2000, constituyendo novedad solo unas pocas. Aun así, compensan su número con su interés, ya que incluso hay alguna de la hoja de planificación de la grabación con el membrete del estudio en la que se ve hasta el número de pistas en las que se grabó el disco.

Otro de los extras que incluye esta reedición son los textos y opiniones de personas que vivieron el ascenso al estrellato de Héroes en aquellos años. De nuevo, pasa lo mismo. Las hay bastante interesantes, como el recuerdo que dedica Javier Clos a la tarde de finales de septiembre del 90 en la que realizó en su pueblo la sesión de fotos de la que saldría la icónica portada del álbum. Otras llegan al bochorno, como la de un chaval que tenía un año cuando se publicó el disco y que hace comentarios sonrojantes sobre botellones y trivialidades adolescentes.

Sí hemos echado de menos la opinión sobre el disco de los miembros del grupo y el productor para que nos contaran algún detalle más de ese mes que anduvieron encerrados en los desaparecidos estudios Kirios de Madrid, registrando tan excelso disco. La remasterización del álbum es a mi entender innecesaria, ya que el disco se masterizó independientemente para vinilo y CD en su momento. Por ello, no adolecía de los problemas de otras grabaciones anteriores masterizadas con el vinilo en mente y que sonaban fatal en CD.

Por lo menos, no se ha visto afectado por la “loudnesswar”, manteniéndose todas sus frecuencias intactas. En la presentación en disco-libro hemos echado de menos que los discos estuvieran alojados sobre un soporte de plástico, en vez del sobre de papel en el que vienen contenidos, ya que esto provoca que se llenen de arañazos y huellas dactilares.

En definitiva, una edición correcta con un atractivo indudable como lo es la inclusión del DVD en directo, pero con unos contenidos y presentación mejorables.

Crítica de Miguel Fernández de MariskalRock.com